Un pico más de la lista
de la FEEC de El repte dels 100 Cims
y uno pico más que me ayuda a conocer una zona a la que, de momento, no había
visitado. Hoy te voy a enseñar una pequeña zona de la Serra del Montsec.
Pues sí, es una zona que
hasta ahora no había visitado. Suelo subir picos que están más en la zona Este
y Norte de Cataluña, por lo que, hacer este pico me sirvió para ver y conocer
más esta zona.
La ruta de hoy consta de
poco más de 16 km. y de unos 900 m. de desnivel. Es una ruta que tiene zonas de
todo, no es que sea muy dura, pero hay zonas en las que hay que tener un mínimo
de rodaje en el mundo del senderismo.
¡Vamos con la ruta!.
Ésta empieza en el pequeño pueblo de Santa Maria de Meià, dejo el coche al lado
de la iglesia del pueblo (al final de éste) y empiezo a caminar por una pista
de tierra que lleva a todos los campos que hay a las afueras del pueblo.
La pista es buena y
cómoda, con desniveles que se pueden soportar. Delante de mí ya puedo ver la
primera montaña que subiré y el Castell d’Ariet.
A los 800 m. la ruta se
desvía a la derecha y se ha de coger un camino ascendente más estrecho y menos
cómodo, lleno de piedras pequeñas y suelas. La pendiente es más pronunciada de
la que llevaba hasta ahora y hay que tomársela con calma. Estoy pasando por la
zona del Serrat de la Vall d’Ariet. Hasta
ahora no había ninguna señal que indicara el camino y ahora me encuentro
pequeños señales redondas rosas.
Pasados 1.2 km., el
sendero se une a la pista general. Pista ancha y de buen caminar. La sigo y me
desvío a la derecha por un sendero más estrecho. Éste es el punto dónde se une
con el punto de vuelta. Hasta ahora, lo que he hecho lo tendré que hacer cuando
vuelva.
Ahora empieza la parte
más dura de la etapa: sendero ancho pero con mucha piedra suelta y, lo peor,
con una fuerte pendiente que hay que tomársela con más paciencia que antes: en
casi 5 km. se ha de superar un desnivel de unos 600 m.
Cuando empiezo a divisar
el pico, el paisaje cambia totalmente: los árboles desaparecen y casi se
convierte en una zona de alta montaña, toda pelada y con unas vistas realmente
sorprendentes.
La zona impresionante es
dónde está otro famoso pico como es el Tossal de Mirapallars, es realmente un
muro de piedra que se extiende durante unos cuantos kilómetros. Otro día he de
subir, pero la vista desde aquí creo que es más espectacular.
Llego a la ermita que
hay en el mismo pico. El día acompaña y no hace mucha calor, fotográficamente
hablando, hace buen día ya que no pega el sol justiciero con su luz dura.
Fotos y video de rigor y
para abajo. Y como dice el dicho “todo lo que sube baja” pues no vamos a ser
menos y toda la altura que he subido pues ahora hay que bajarla.
Esta vez por un sendero
mucho más estrecho (apenas 40 cm) y tan o más dificultoso como la subida por la
pista de piedras. Hay que tener mucho cuidado por esta zona porque un resbalón
puede pasarnos factura y nos podemos hacer algo de daño.
Delante de mí el muro
está presente en toda la bajada.
![]() |
Ruinas que quedan de antiguas torres de vigilancia |
Dejo el sendero para
girar 90º hacia la derecha. Estoy en los Llanets
dels Castellets una zona totalmente diferente a lo que había caminado hasta
ahora ya que la ruta me lleva por campos que habían sido labrados, por lo que
no hay sendero o camino definido y hay que seguir el track para no andar de más
en vano.
Llega un momento que
dejo los campos y he de buscar el camino/pista.
Entre campos,
edificaciones en ruina y demás, llego al punto donde me uno a la parte del
track donde comparto ida y vuelta y cojo otra vez la parte de la pista que
había cogido antes.
En una curva, me desvío
a la izquierda (ojo con pasarse este punto porque entonces andaremos más) y
cojo el sendero ancho de bajada.
![]() |
Pequeños “muros” naturales |
![]() |
Dibujando en el campo |
![]() |
Ya de vuelta y “el muro” siempre presente |
En poco menos de 30
minutos llego otra vez al coche.
Es una ruta bonita,
fácil por según qué zonas y exigente por otras. De vistas no está nada mal y la
parte del muro de la zona del Tossal de Mirapallars es sorprendente.
Aconsejable hacerla con niños que estén un poco preparados, ya que la subida
con piedras puede llegar a ser un poco dura para ellos y en la bajada por el
sendero estrecho, al estar con piedras, hay que ir con cuidado.
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